User-agent: Mediapartners-Google Disallow: El Club de la Cazuela: Una de romanos

10.4.09

Una de romanos

Romanos de Montilla

Luis Rubio Carretero, Manuel Ramirez Climent, Francisco Criado, Juan "El del Billar", y agachado José Naranjo.


A mí modo de ver, si hay un acto que le da carácter singular a la Semana Santa de Montilla con respecto a la de otros pueblos, ese es sin duda el ver desfilar a la Centuria Romana Munda.

Esta costumbre romana de prender a Jesús y escoltarlo en interminable procesión por las calles de Montilla, es antiquísima, tanto, que yo la recuerdo de chiquillo y medio siglo me contempla. Pero incluso mí padre me contaba que había conocido de joven la banda de los romanos. Un primo hermano de mí padre, Manuel Portero, llegó a desfilar durante años en la banda de los romanos con el estandarte del águila, (el mas preciado de los estandartes de las legiones romanas). Hombre alto y con una cara de rasgos duros, portaba el estandarte con marcialidad y dando unas revueltas llenas de vigor y vistosidad, algo que después los sucesivos aquilifer (soldado romano que portaba el estandarte) han seguido imitando esta forma de llevar el águila pero con desigual resultado. Y es que, de algo le tuvo que servir el haber estado varios años de legionario en Melilla. De allí se trajo también unos cuantos tatuajes, recuerdo uno en particular que tenía en la cara interior del antebrazo de una mujer en bañador, cuando tensaba los músculos la mujer movía las caderas, y eso provocaba las risas entre la chiquillería.


Esto que comento de mí tío Manuel es de la época del blanco y negro, muy anterior a esta generación de romanos montillanos que ilustra este post. La Semana Santa nos ofrece valiosas imágenes y anécdotas del sentir popular de esta tradición semana santera. Tradición que incluso estuvo un tanto desparecida cuando los romanos desfilaban con trajes prestados y a cambio de unos bocadillos y algo de metal. Mucho ha llovido desde que aquellos trajes y armaduras se guardaban en el almacén del “Telar” dormitando hasta la próxima Semana Santa.

Con la visión que ofrece el tiempo transcurrido, hay que reconocer la labor encomiable de un grupo de entusiastas que crearon la Centuria Romana Munda, hace ahora 25 años.


Y es que, en todo este tiempo esta asociación con sus actividades vinculadas a la Semana Santa han puesto a este pueblo en lo más alto. Especialmente significativa es la Sentencia Romana, que alcanza difusión nacional.

Como original es el acto del Prendimiento, la recuperación de una tradición que estaba en olvido y que la Centuria Romana recreaba prendiendo a Jesús ante el pueblo de Montilla en la tarde del Jueves Santo. Pero, la ausencia de sensatez dio lugar a la falta de “entendimiento”, y desde el año 2001 este acto lo realiza una formación de romanos de la propia Hermandad de Jesús Preso y María Santísima de la Esperanza. Pero esta es otra historia.


Cristo en la Flagelación, imagen realizada por los artistas montillanos Solano Salido Jiménez y su hijo Francisco Salido Mendoza. Esta imagen dejó de procesionar el Jueves Santo, y hace años que duerme el sueño de los justos en la sala de utillajes de esta Hermandad.

10 comentarios :

Anónimo dijo...

Larga vida y gloria eterna.

Julio Portero dijo...

"Marchando una de piratas
nadie doblegó su espada
y bastó una mujer hermosa
para cortarles las alas".

Elo, tio que te has equivocao de cine. Que aquí hoy ponen UNA DE ROMANOS.

Manuel Ruiz dijo...

No conozco Montilla, ni su Semana Santa ni a sus romanos de Munda, pero leyendo tu artículo he disfrutado del desfile y de ese punto de nostalgia que lo hace tan sabroso incluso para quienes solo podemos imaginarlo.
Saludos

Julio Portero dijo...

Manuel, tienes que sacar algo de tiempo y dejarte caer por aquí. Agradezco tus palabras que me resulta muy alagadoras viniendo de un profesional del periodismo.

Gracias y saludos

Anónimo dijo...

Es verdad ,se me fue la olla, je, je, y tu te equivocaste de estrofa, ¿es algo así?:

Marchando una de piratas,
larga vida y gloria eterna
para hincarles de rodillas
hay que partirles las piernas

Anónimo dijo...

Me parece de poco gusto, ilustrar una página con tanto trasfondo de costumbrismo y rancia tradición, con una imagen que está retirada del culto público.
Claro, salvo si se quiere hacer leña del árbol caído, a me olvidava, eso es otra historia.

Julio Portero dijo...

Para dar lecciones de buen gusto primero hay que demostrar tener maneras y estilo, y después respetar el gusto de los demás. Comprendo que las costumbres y las tradiciones no te gustan, incluso te moleste recordar. A mí, en cambio me gustan, porque tuve una infancia feliz y recordar aquellos tiempos es rescatar de ese rincón de la memoria -que todos tenemos- los recuerdos que gratamente se han vivido.

Pero no puedo compartir contigo que llames despectivamente "rancias” a las costumbres, sean de la índole que sean, paganas o religiosas, y te lo dice uno que precisamente no visita las iglesias, y no por eso he sido nunca una persona irreverente. Las tradiciones amigo mío, son las señas de identidad de los pueblos conformando su singularidad y la idiosincrasia de sus habitantes.

A mí no se me olvidan fácilmente las historias, incluso ni las que me contaba mi abuelo José. Así que, como veo que hay retranca en tu comentario y me insistes, pues te contare algo que quizá desconoces de esta singular historia. Porque a medida que estoy escribiendo me doy cuenta que en realidad lo que te ha molestado es la visión de esta imagen de Cristo en la Flagelación.

Cuando dices la frase “No hay que hacer leña del árbol caído”, estás reconociendo que algo se hizo mal en su día, y es como dicen ahora los rancios nostálgicos del franquismo “no hay que reabrir la heridas de la guerra civil. Y yo me pregunto, ¿de quién son las heridas padecidas? Del agresor o del agredido?
Esta imagen, que tú dices esta retirada del culto, te recuerdo que fue bendecida con todo lujo de honores y con ágape incluido como manda la Santa Madre Iglesia Católica, y expuesta al culto, y procesionada. Me pregunto, ¿que habrá hecho la imagen para estar proscrita y enclaustrada?
Y yo te cuento, porque árbol era, y por suerte no nació para servir de leña en la hoguera de cualquier chale, su madera de pino flandes fue tallada bajo el cielo de Montilla, y dos años más tarde tomo forma de escultura representando una imagen de Cristo en la Flagelación. Si hay algo caído, ha sido este Cristo del pedestal en el que lo subieron el día de su bendición. Sin embargo, no se les ha descolgado la cara de vergüenza de este sacrilegio a los artífices incultos que trasladaron con nocturnidad y alevosía esta imagen a un taller de Córdoba para ser modificada. Sin conocimiento y sin consentimiento de sus autores. Ahora que se habla tanto de los derechos ¿en qué reunión del Sanedrín se acordó pisotear los Derechos de Autor de estos artistas. Montillanos para más ofensa? A día de hoy, ni tan siquiera han recibido estos artistas unas palabras de disculpa, y respeto por tantas buenas obras como procesionan en la Semana Santa Montillana.
Puede ser que pensaran estas buenas almas de la hermandad, que modificando la imagen a su antojo y criterio lograban antes el beneplácito de alcanzar la gloria. Pero recordándoles unas religiosas palabras les recuerdo que: “Dios escribe derecho con renglones torcidos”. Este mal proceder por parte de la Hermandad de Jesús Preso, y la posterior denuncia de los autores sentó un precedente sobre los derechos de autor que protegen por ley la obra de arte. Esto ha servido para que muchos de los analfabetos cúbicos (defino a este género de personas como aquellos que teniendo oportunidad de saber leer y escribir no saben ni donde tienen la cara, y en cambio presumen de saber de todo), estos personajes que pululan por las hermandades cuyo único afán es el protagonismo de llevar en la procesión el medallón en el pecho empezaron a entender y respetar que una imagen no es un mueble-bar, ni una mesita de noche, que una vez pagada al carpintero se puede hacer con el mueble lo que se quiera. No señor. Una imagen merece el respeto por lo que representa y también por ser una obra de arte. Incluso estando pagada - para colmo y ofensa la imagen de Solano Jiménez y su hijo Francisco Salido estaba impagada cuando ocurrieron estos hechos– Esto ha servido para que las hermandades empiecen a comprender que no son dueños de nada, y que su obligación es la de salvaguardar el patrimonio que pertenece al pueblo de Montilla, porque bastantes aportaciones se hacen a las cofradías cuando piden colaboración.
Por eso creo que al ver de nuevo esta imagen te haya producido este malestar, creyendo que esta imagen ya estaba desterrada de la memoria colectiva como el que esconde las miserias debajo de la alfombra.
Esto supuso un borrón para esta hermandad que alcanzo notoriedad nacional en los medios. Al igual, que el incidente que esta misma hermandad protagonizo con la Centuria Romana Munda al negarle a los romanos en pleno Jueves Santo, y con las imágenes en la calle realizar “el Prendimiento”. Otra importante acción que pasara a la historia por el buen hacer de estos hermanos.
A veces ocurre que el tiempo pone a cada uno en su justo lugar. Unos pasan a la historia como auténticos patanes y otros serán recordados por su buen hacer. Caso de estos artistas y de la Centuria Romana.

Y aquí doy por concluido este comentario, porque ya es tiempo de caracoles.

6:32 PM

Anónimo dijo...

Hablando culinariamente:
¡El que se pica, ajos come!

Julio Portero dijo...

Anónimo,
después de leer tan profunda reflexión, que quieres que te diga.
Que eres de los que tiran la piedra y después esconden la mano, pues claro que si.

Julio Portero dijo...

Corrijo el nombre del artísta imaginero montillano, al escribir
Solano Jiménez,queria decir Solano Salido Jiménez.