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6.6.09

Merino

Antonio Merino Baena "Merino", es uno de esos trabajadores que toda su vida laboral la ha desarrollado en la misma empresa. Su oficio es de camarero en el restaurante Las Camachas, donde entró echo un chiquillo hasta hoy que se ha convertido en todo un veterano profesional de la hostelería. Cada día se vuelca en lo que hace y siempre le pone ganas y mucha ilusión, y al mal tiempo buena cara, aunque la procesión va siempre por dentro.
Viéndole trabajar se nota a la legua que este hombre disfruta con su trabajo. Ahora que su edad- cincuenta y pocos años- ha traspasado el ecuador, su salud se ha visto resentida y es que, el corazón te da estas cornás traicioneras que no avisa hasta el último momento, y a veces consigue vencerte dejándote tirado en la arena. Por suerte, ese estupendo equipo de ángeles de la guarda que son los médicos del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, le han cogido en volandas para devolverle la salud, y lo han conseguido. Porque todavía a este cuajado camarero le queda cuerda para rato.

Ahora amigo Merino, después del susto te toca seguir a pies juntillas las indicaciones de tu médico, y debes aprender la lección de tomarte las cosas con más tranquilidad, porque si de ti dependiera ya te habrías incorporado al trabajo. Aprovecha este tiempo de recuperación para dedicarlo a la familia y a tu gran afición que son los pájaros.

Cuídate que en esta vida la salud es el bien mas preciado que tenemos. Y no esperes monumentos porque al final como dice tu amigo y compañero José luis Alcaide "Bigotes": "los monumentos sirven para que las palomas se te caguen encima".

1.6.09

Crispín

Personal del restaurante Las Camachas (año 1968), podemos ver en la fila de camareros y tercero por la izquierda a Antonio Berral Graciano "El Niño los Cabos", al que se considera artifice del popular Crispín.

Crispín

El crispín es una típica tapa de la localidad cordobesa de Montilla, que esta presente en todos los establecimientos de la zona que presumen de tener buena cocina. El saber popular adjudica la cuna y el artífice de esta singular tapa montillana, situándola en la cocina del Bar "El Niño" y en las manos del desaparecido Antonio Berral Graciano "El Niño los Cabos". Tras su paso por el afamado restaurante Las Camachas, probo suerte y abrió su propio negocio donde dejo todo su saber y experiencia en la cocina de este bar que estaba situado -digo estaba porque hace un par de años sus últimos propietarios los trabajadores que tuvo El Niño terminaron cerrando- en la avenida Puerta de Aguilar. Dicen quienes le conocieron bien que era un gran aficionado a los toros y en su juventud tuvo alguna ocasión de demostrar sus lances. Del oficio de su padre que era zapatero le viene el curioso sobrenombre con tintes taurinos que lucía con orgullo. Con el tiempo y en honor a su padre y su gremio bautizaría esta creación culinaria con el nombre del patrono de los zapateros "San Crispín" (19 de noviembre). Desde entonces y hasta nuestros días seguimos disfrutando de esta popular delicia gastronómica que nos dejo El Niño los Cabos.
El crispín consiste en un rollito de rosada o merluza en cuyo interior encierra un relleno a modo de bechamel fria con cuerpo -tipo masa para croquetas-, que va empanado y frito acompañado de tomate kepchup y mayonesa (salsa rosa) por encima. En esto del relleno también hay quien lo hace de patata cocida.

Ingredientes:
(para seis crispines)
6 filetes de rosada o merluza
250 gr. de gambas peladas
1 cebolla mediana
harina
leche
aceite de oliva
huevo
pan rayado

Para esta salsa rosa
5 cucharadas de mayonesa
2 cucharadas de tomate kechup

Preparacion:
Primeramente hacemos un refrito con la cebolla muy picada cuando este dorado añadimos las gambas troceadas. A continuación, ponemos la harina, la leche, una pizca de sal y removemos hasta formar la bechamel como si hiciéramos masa para croquetas. Una vez que la masa adquiera el grado deseado y esta se despegue de la sartén volcamos sobre una fuente y dejamos enfriar para poder trabajarla después, este será nuestro relleno.

Preparamos el filete envolviéndolo en papel film para que no se rompa a la hora de extenderlo con la palmadera, golpeamos con suavidad el filete que debe estar cortado fino, puede ser de rosada o merluza y hubo un tiempo donde también se utilizaba el mero -en esta ocasión hemos utilizado rosada-.
Una vez extendido ponemos encima la masa a todo lo largo y envolvemos dándole forma de rulo. Pasamos por harina, huevo, y pan rayado y damos forma con las manos para que quede apretado y no se abra a la hora de freírlo. Si es necesario se pasa nuevamente por huevo y pan rayado. Una vez frito se deja sobre papel de cocina y finalmente se pasa al plato y se cubre con la salsa rosa.
Esta, amigos mios es la receta del famoso
Crispín que hemos querido compartir con todos vosotros y de manera especial con María una montillana que estudia en París y que tanto añora a su pueblo y a nuestra gastronomía.
Se puede degustar esta delicia entre otros establecimientos en los restaurantes: Las Camachas, Don Gonzalo, Los Arcos,... al precio mas que razonable de 3 euros.

12.4.09

Manuel Torres, el saber que da la experiencía

El trabajo bien hecho de un veterano profesional de hostelería
Manuel TorresEn unos tiempos en los que los cocineros han alcanzado tal nivel de fama que se han convertido en estrellas de relumbrón. Conviene hacer un acto de reflexión porque se puede llegar a creer que un cocinero lo es todo dentro del amplio sector de la restauración, como si el resto del personal fuesen meros comparsas. En ocasiones, se ningunea la figura del Jefe de Sala/Maître, tan importante o igual que la del Jefe de cocina. Pero ocurre generalmente que estos cocineros que a todos nos resuenan sus nombres en la cabeza son a la vez los propietarios del restaurante, de ahí que el mérito no lo quieran compartir con nadie.

Manolo Torres nos confiesa desde su experiencia de más de 35 años en hostelería, que uno de los secretos de su trabajo es tener la suficiente psicología para saber cómo hay que llegar en cada momento al cliente. "A veces, hay clientes que demandan cercanía de trato y otras que observo que necesita de cierta distancia".

Y es aquí, donde se pone de manifiesto la importancia de su profesión como responsable directo con el cliente. Por eso, es necesario que exista una buena cocina y un servicio que este a la altura de los platos que se ofrecen.
Torres, atesora una gran formación que le ha procurado ser un gran conocedor de la restauración clásica y su estilo de servicio lo pone en práctica cada día en el restaurante Las Camachas. Donde se cuida la importancia de los detalles.
Entre las muchas funciones de un Jefe de Sala/Maître, está la de planificar, organizar, desarrollar, controlar y gestionar las actividades que se realizan en la prestación de servicios de comida y/o bebida, coordinando y supervisando los distintos recursos que intervienen en el departamento para conseguir el máximo nivel de calidad y mirando la comodidad del cliente.


Manuel Torres, trabajando con el rechoud
En el último Salón Gourmet celebrado en Madrid estos días, hubo un concurso para premiar al mejor Jefe de Sala, quizás en justo desagravio con los cocineros mediáticos y para darle la importancia que tienen estos profesionales del restaurante. Algunos de los requisitos que se les pedía era saber emplatar al igual que ser capaces de confeccionar un menú, pasando por servir y poner una mesa.
Todas estas labores mas las anteriormente descritas se concentran en el saber de este profesional montillano, que desde su dilatada experiencia ha pasado por todos los puestos hasta crecer como el gran profesional que es hoy en día.

10.4.09

Una de romanos

Romanos de Montilla

Luis Rubio Carretero, Manuel Ramirez Climent, Francisco Criado, Juan "El del Billar", y agachado José Naranjo.


A mí modo de ver, si hay un acto que le da carácter singular a la Semana Santa de Montilla con respecto a la de otros pueblos, ese es sin duda el ver desfilar a la Centuria Romana Munda.

Esta costumbre romana de prender a Jesús y escoltarlo en interminable procesión por las calles de Montilla, es antiquísima, tanto, que yo la recuerdo de chiquillo y medio siglo me contempla. Pero incluso mí padre me contaba que había conocido de joven la banda de los romanos. Un primo hermano de mí padre, Manuel Portero, llegó a desfilar durante años en la banda de los romanos con el estandarte del águila, (el mas preciado de los estandartes de las legiones romanas). Hombre alto y con una cara de rasgos duros, portaba el estandarte con marcialidad y dando unas revueltas llenas de vigor y vistosidad, algo que después los sucesivos aquilifer (soldado romano que portaba el estandarte) han seguido imitando esta forma de llevar el águila pero con desigual resultado. Y es que, de algo le tuvo que servir el haber estado varios años de legionario en Melilla. De allí se trajo también unos cuantos tatuajes, recuerdo uno en particular que tenía en la cara interior del antebrazo de una mujer en bañador, cuando tensaba los músculos la mujer movía las caderas, y eso provocaba las risas entre la chiquillería.


Esto que comento de mí tío Manuel es de la época del blanco y negro, muy anterior a esta generación de romanos montillanos que ilustra este post. La Semana Santa nos ofrece valiosas imágenes y anécdotas del sentir popular de esta tradición semana santera. Tradición que incluso estuvo un tanto desparecida cuando los romanos desfilaban con trajes prestados y a cambio de unos bocadillos y algo de metal. Mucho ha llovido desde que aquellos trajes y armaduras se guardaban en el almacén del “Telar” dormitando hasta la próxima Semana Santa.

Con la visión que ofrece el tiempo transcurrido, hay que reconocer la labor encomiable de un grupo de entusiastas que crearon la Centuria Romana Munda, hace ahora 25 años.


Y es que, en todo este tiempo esta asociación con sus actividades vinculadas a la Semana Santa han puesto a este pueblo en lo más alto. Especialmente significativa es la Sentencia Romana, que alcanza difusión nacional.

Como original es el acto del Prendimiento, la recuperación de una tradición que estaba en olvido y que la Centuria Romana recreaba prendiendo a Jesús ante el pueblo de Montilla en la tarde del Jueves Santo. Pero, la ausencia de sensatez dio lugar a la falta de “entendimiento”, y desde el año 2001 este acto lo realiza una formación de romanos de la propia Hermandad de Jesús Preso y María Santísima de la Esperanza. Pero esta es otra historia.


Cristo en la Flagelación, imagen realizada por los artistas montillanos Solano Salido Jiménez y su hijo Francisco Salido Mendoza. Esta imagen dejó de procesionar el Jueves Santo, y hace años que duerme el sueño de los justos en la sala de utillajes de esta Hermandad.

7.3.09

Alcachofas con jamón

Aurora Mendoza (c)J.PorteroEn la cocina con Aurora Mendoza, de su recetario de platos típicos de la cocina montillana extraemos este guiso de alcachofas con jamón, que esta excelente cocinera y ama de casa prepara de maravilla. Siendo siempre el resultado que lleva a la mesa de coge pan y moja.

Uno, que ha tenido la suerte de probar sus guisos puede dar buena fe de sus excelentes habilidades gastronómicas. Utilizando productos sencillos y con pocos avíos es capaz de elaborar platos que a nadie deja indiferente. Se agradece su experiencia en estos tiempos de crisis para enseñarnos a elaborar estas recetas con sabor a cocina tradicional.

La cocina en la mayoría de las ocasiones no necesita de grandes aditamentos para que el resultado sea igual de apetecible. A veces, el exceso de ingredientes cuando se cocina un producto natural como en este caso las alcachofas solo sirve para enmascarar su sabor. Craso error, porque no por poner más ingredientes en la cazuela se consigue mejor resultado. Sobre todo, si lo que buscamos es disfrutar del genuino sabor de las alcachofas frescas.

Montilla, fue tierra conocida por poseer incontables huertas en su término, y en las que se producían buenos productos hortícolas, y sobre todo alcachofas de gran calidad, las mismas que dieron fama a este pueblo - y no como he leído en varios sitios cuando dan la receta de las "alcachofas a la montillana", vienen a decir que su nombre se debe al uso del vino de Montilla-. Con el tiempo se ha visto desaparecer este cultivo. Y aunque nos pese reconocerlo la gran demanda de este producto se abastece ahora de la Montiela, de las huertas de Cabra y Puente Genil. Pero bueno, esa es otra historia.

Cazuela de alcachofas con jamón (c) J.PorteroAlcachofas con jamón, del recetario de Aurora Mendoza

La temporada de las alcachofas frescas va desde otoño hasta primavera, así que este es buen momento para consumirlas. Para elegirlas hay que saber que las más tiernas son las que están cerradas y sus hojas muy apretadas. Dentro de las múltiples preparaciones que admite ofrecemos esta receta que es muy fácil de elaborar.

Ingredientes
(4 personas)
2 kg. de alcachofas (después de limpiarlas se quedan en 1kg.)
2 lonchas de jamón,
1 vaso de vino fino de Montilla
1 cebolla,
2 dientes de ajo,
Aceite de oliva,
Sal

1/2 limón
1/2 pastilla de caldo

Elaboración:
Comenzamos cortando los tallos a las alcachofas, y vamos retirando las pencas duras hasta llegar a las menos verdes y tiernas, cortamos las puntas y troceamos en cuartos. Se sumergen en agua con unas rodajas de limón para que no oscurezcan.
Ponemos al fuego una cazuela con aceite, la cebolla picada y los ajos. Añadimos las alcachofas escurridas y rehogamos. A continuación, ponemos un vaso de vino y agua hasta cubrir, se añade un poco de sal y la pastilla de caldo diluida. A media cocción echamos el jamón troceado y dejamos que hiervan hasta que estén tiernas que será alrededor de 25 minutos. Si se desea se le pueden revolver un par de huevos antes de apartarlas.

Mercado de abastos de Nápoles (c)Paco Salido
Vendedor de alcachofas en el mercado de Nápoles (Italia) Foto: Paco Salido
Una muestra de las variedades que existen de alcachofas. Estas moradas son muy populares en Nápoles. Entre las mas conocidas están: la Blanca de Tudela (España), la Camus de Bretaña, la Espinosa Sardo en Génova (Italia), Pequeña Violeta de la Provenza francesa, la Madrileña, la Romanesca, la Californiana, la Verde de Laón en Italia, la Blanca en los Pirineos… En España también son muy ricas y preciadas las alcachofas de Castellón y de la Vega Baja del Segura (Alicante) y en la huerta de Murcia y el Campo de Cartagena.

5.3.09

Recordando a Felix Reyes

El fotógrafo ambulante Félix Reyes, era conocido por el apelativo cariñoso de "El Sultani". 
Hace un tiempo incorporé una sección en este blog que he denominado "Oficios con Solera" tenía entonces, y sigo manteniendo ahora la idea de recoger en esta página aquellos viejos oficios y a sus artesanos que durante décadas fueron el bullir diario de este pueblo. Por unas razones o por otras con la desaparición de los maestros artesanos se han ido perdiendo también casi a la par gran parte de los oficios antiguos.
Incorporo a esta galería de personajes y sus oficios al que fuera fotógrafo ambulante, Félix Reyes "El Sultani", rescato del olvido la figura de este hombre singular que hace tiempo nos dejó. Quienes le conocieron dicen de él que siempre estaba de aquí para allá con su cámara a cuestas ambulante por la ferias. Rememorar ahora la imagen del fotógrafo minutero instalando su cámara en el parque es todo un ejercicio de memoria. Como también lo es cerrar los ojos y estar viendo ahora como aquellos curiosos chiquillos miraban las fotografías que decoraban la caja mágica. Fotos de niños rollizos, parejas de enamorados, un galán de finos bigotes... El milagro se producía cuando el minutero escondido bajo una tela negra decía: ¡quietos!. Y ese instante quedaba inmortalizado.
El fotógrafo hacía de ese momento todo un acontecimiento que quedaba plasmado para siempre en un trozo de papel bromuro. Eran fotografías como surgidas de una chistera -revelado en la misma caja, cubo con agua para quitar las sales de plata, un ligero secado al aire y foto para el cliente-. Era magia.
Recordar el buen hacer de este buen hombre representa algo más que una evocación nostálgica, se trata de reconstruir una página con sus vivencias, que al fin y al cabo, son las experiencias de estos hombres sencillos con las que se escribe la historia popular de los pueblos.
Fue a finales de 1939, recién terminada la guerra civil cuando Félix Reyes empezó en el difícil campo de la fotografía, un mundo nuevo para él. Hasta entonces había tenido múltiples ocupaciones, y con la misma facilidad pelaba un borrico o cerraba un trato que hacía una fotografía al minuto.
"Un día vino de fuera un pariente a visitarme que era minutero y me propuso enseñarme el oficio. Aprendí y montamos una sociedad, compramos tres caballos y una moto de madera para ir por las ferias".
La primera cámara que tuvo se la hizo un carpintero en Montilla al que llamaban "el negro". Con esta rudimentaria caja de madera provista de una sencilla lenta fue como empezó haciendo fotos en los jardines de los patos, concurrido parque de Córdoba. Allí había también dos fotógrafos minuteros que eran hermanos. En verano con el buen tiempo cogía la cámara y los bártulos y se iba a recorrer las ferias de los pueblos de la comarca. Se cobraba muy poco por aquel entonces, por dos fotos pedía seis perras gordas, hablo del año 45. En aquel tiempo se necesitaba un permiso del gobernador civil para hacer fotos en la vía pública. Como se ganaba muy poco había días que no hacía ni para pagarse una cama, y tenía que dormir debajo de la lona de los caballitos de la feria. Su cena se componía la mayoría de las noches de un chusco de pan.
Ante su cámara han desfilado toda una legión de niños montados en el caballito; los mismos que hoy, ya adultos atesoran aquella pajiza fotografía que les hizo Félix Reyes "El sultani".
Años más tarde su hijo heredo este oficio, pero adaptándose a los nuevos tiempos empleaba polaroid y cámaras reflex. Y durante muchos años ha estado fotografiando a los turistas en el patio de la mezquita de Córdoba.
Este hombre tenía 84 años cuando entable amistad con él, corria el año 1989, me contó algunos pasajes de su vidad ya en aquel tiempo estaba delicado de salud y tenía serios problema de vista. Tenía por costumbre bajarse al paseo de Cervantes y sentarse en un banco a la recacha sin desprenderse de su inseparable chivata (bastón).
Fue el último de una generación de fotógrafos ambulantes de los muchos que pululaban por las ciudades, y que hicieron de su habilidad su oficio.

Los últimos avances en el campo de la fotografía han dejado en desuso las legendarias reflex y su sistema de negativo, atrás quedaron los aluros de plata. Estamos en la era digital.
El modo de hacer fotografía hoy ha conquistada a la sociedad, y las compactas digitales junto con los móviles que hechan fotos han proliferado como hongos.
La fotografía ha perdido parte de ese alo mágico y romántico que siempre tuvo. Por esto, hoy mas que nunca tiene sentido recordar a este artesano del retrato.


Julio Portero

29.1.09

Historia de una Paella

A través de Rafael Rubio "América", recibo estas fotografías que corresponden a unas jornadas culturales que tuvieron lugar hace algún tiempo en las instalaciones del C.E.I.P. "GRAN CAPITÁN" de Montilla. Y que fueron organizadas por la Asociación de Padres y Madres de Alumnos, de este colegio.

Sin ser una noticia de actualidad como he comentado, si que, encuentro interesante esta información sobre todo por el trabajo colectivo y desinteresado que vienen realizando la junta directiva del A.M.P.A., y que merece ser reconocida.

Comento la historia de estas jornadas centrándome en los preparativos del tema culinario. El día anterior al evento el cocinero Rafael Rubio, con la colaboración de los miembros -y miembras, como dijo en su día la ministra de igualdad- de esta asociación estuvieron preparando el fondo para esta enorme paella.
En este blog se ha escrito en alguna ocasión y me reitero ahora al decir que la gastronomía es cultura porque está muy enraizada en nuestras tradiciones y por lo tanto, forma parte muy importante de nuestras señas de identidad. Que junto con otras manifestaciones culturales que se desarrollan a lo largo del año conforman la idiosincrasia de este pueblo. Y es que, la comida contribuye a la convivencia máxime cuando es compartida porque procura la convivencia. Y que mejor punto y final para concluir unas jornadas culturales que hacerlo con un buen plato de arroz , pan y vino de nuestra tierra en un ambiente de sana camaradería.


<span class=Paellera con el fondo preparado para 500 plazas.
Entre los ingredientes empleados para hacer el sofrito o fondo de esta gigantesca paella destacamos los siguientes: 15 pollos, 20 kilos de lomo de cerdo, 32 kilos de arroz, 18 kilos de tomates, 8 kg. pimientos verdes, 8 kg. pimientos rojos, 6 kg. cebollas, 15 l. aceite de oliva...

" Vilchez" y "el Bellio" remueven el arroz con la ayuda de los remos.

El resultado final de esta descomunal paella salta a la vista. Un arroz de grano suelto con su toque final meloso, y dicho por los asistentes que tuvieron la suerte de degustarlo, la paella estaba deliciosa.

Rafael Rubio Rafael Rubio recibe una placa de manos del presidente del AMPA del CEIP "GRAN CAPITÁN" Paco Arrabal, en agradecimiento por su colaboración con el deporte escolar. También están presentes en esta fotografía Antonio Jiménez (Terry), Pepe Bustamante, y Agustín García (en el centro de la foto).

En el transcurso de la jornada cultural también se entregaron los premios de los juegos y actividades organizadas.

8.1.09

Cena de Reyes

El día de Reyes los compañeros/as y amigos del Restaurante Las Camachas, y Hotel Don Gonzalo, acompañados con sus respectivas/os, celebramos una gran cena de amplio repertorio gastronómico. Donde no nos faltó nada de nada, ni gloria... empezamos con unos selectos aperitivos a base de Jamón Ibérico -ibérico de verdad-, Queso añejo, Caña de lomo ibérica, para continuar con un primer plato de mariscada de Gambas Blancas de Huelva y Langostinos de Sanlúcar, esto nos estuvo entretenidos un buen rato. Acompañamos este plato con un vino Blanco Viña Verde de Bodegas Gracia Hnos. Sin perder de vista el excelente vino Fino de la Casa (bodega propia).
El segundo plato se componía de: Suprema de Lubina, Paletilla de Cordero, o Entrecot de Buey, toda una pantagruélica cena que se regó con Ribera del Duero "Protos 2005". Poniendo el colofón un goloso postre con cuidada presentación a base de tarta de bizcocho y nata, con gajos de mandarina, virutas de cacao y puro de chocolate. Cava, Café y mucha agua mineral para ayudar al trasiego digestivo.
Como es de rigor en este tipo de comidas en las que fluye la camaradería y el buen ambiente hubo unas sentidas palabras en las que se hizo hincapié en no perder este encuentro. Se agradeció la presencia a los que pudieron asistir, y también hubo un recuerdo para los que no pudieron hacerlo por distintas razones. Deseando que para el año próximo estemos todos y no falte nadie.
Copa de cava en alto se brindo por la magnífica cena que habíamos tenido, y todos nos deseamos lo mejor para este año que comienza. Después de tanta emoción nos encaminamos a la planta alta de Jarata, al Pub Monet, donde el Gin tonic -eso sí, con moderación- el baile y el Karaoke nos hizo aflorar ese artista de la canción que todos llevamos dentro, o eso nos creemos algunos cuando cogemos el micrófono. Unos con mas oído y cualidades vocales, y otros, entre ellos yo mismo "no cantamos ní en lo alto de un trillo". Pero lo importante era divertirnos y reírnos como hacía tiempo, y esa noche disfrutamos de lo lindo.

Esta cena fiesta tuvo lugar en las instalaciones del nuevo Complejo Jarata, donde tenemos que reconocer el excelente trato recibido por Pepe Márquez y su equipo, que nos trataron esa noche
como auténticos reyes. Nunca mejor dicho.
Juanito Alguacil y Manolo, dirigieron el timón de la cocina que llegó a muy buen puerto, y justo será felicitarles también porque todo lo que salió de su cocina estaba a pedir de boca. Gracias compañeros de Jarata, prometemos volver y repetir otra noche mágica como fue esta del día 6 de enero del 2009.

Albúm de fotos de la Cena de Reyes


23.12.08

La elección de un buen jamón

Rafael Rubio "América", elije un jamón de la bodega.
Se aproxima la Navidad y con ella el mes de mayor consumo de jamón de todo el año. Esto es debido principalmente a la costumbre que existe con las cestas navideñas y donde las empresas tienen a bien regalar un jamón a sus empleados. También contribuye que en estas fechas se organicen un gran número de comidas de empresa, de amigos y compañeros, y fundamentalmente familiares donde se suele tener la alacena provista de buenas viandas y en la que no falta una buena pieza de jamón.

Del jamón en tiempos pasados se ha llegado a decir: "cuando un pobre come jamón o está malo el pobre o está malo el jamón". También he oído decir a modo de sentencia: "El jamón ha salvado más vidas que la penicilina". No hay que olvidar su alto valor nutritivo y el gran aporte de vitaminas y minerales que contiene entre los que destacan el hierro y el zinc, tan importantes en nuestra alimentación.

Existen dos tipos bien diferenciados de jamones, el serrano (o de bodega) también llamado blanco que su alimentación es a base de piensos. El jamón serrano tiene tres etiquetas, la oro, la plata y la gran serrano donde se definen los períodos de curación del jamón. Según la Fundación del Jamón Serrano, los jamones que llevan la contraetiqueta de la Fundación se presentan en tres gamas de curación:
PLATA, para jamones serranos con curación de 8 a 11 meses; ORO, para jamones serranos con curación de 11 a 14 meses y GRAN SERRANO para jamones serranos con más de 14 meses de curación.

Y luego está el ibérico también llamado de pata negra, cuya alimentación hace que se englobe en tres categorías:
Jamón ibérico de bellota, alimentado con bellotas y criado en montanera, donde el animal en verano pasta en libertad por la dehesa sin el cómodo pienso, esto le obliga a moverse y buscar la comida, en este caso las bellotas. Se consigue con estos largos paseos que su grasa se infiltre en los músculos aparte del complemento de su natural alimentación.
Jamón ibérico de recebo, los primeros meses alimentado con bellotas y el resto hasta su engorde con piensos.
Jamón ibérico de cebo, alimentado de principio a fin con piensos.
Los cordobeses tenemos la gran suerte de tener en nuestra comarca una de las mejores denominaciones de origen en la elaboración de productos de calidad procedentes del cerdo como es la D.O. Valle de los Pedroches.
Las denominaciones de origen reconocidas del cerdo ibérico son:
Jamón Ibérico D.O. Jamón de Huelva. Jamón elaborado en la sierra de Huelva, en los pueblos de Aracena, Cumbres Mayores, Cortegana, Jabugo, etc. que conforman la zona de elaboración de de la Denominación de Origen Jamón de Huelva.
Jamón Ibérico D.O. Los Pedroches. Forma exterior alargada, estilizada, perfilada mediante el llamado corte en V. Conserva la pata y la pezuña para facilitar su identificación. Color característico del rosa al rojo púrpura y aspecto al corte con grasa infiltrada en la masa muscular.

Jamón Ibérico D.O. Jamón de Guijuelo. Desde el siglo XVI los cerdos característicos de esta denominación se crían en las estribaciones de las sierras de Gredos y Béjar, dentro de las comunidades autónomas de Castilla y León y Extremadura, así como en Andalucía y Castilla-La Mancha. La zona de elaboración amparada está constituida por 77 municipios del sureste de la provincia de Salamanca, siendo la localidad cabecera la propia Guijuelo.
Jamón Ibérico D.O. Dehesa de Extremadura.
La zona de producción se sitúa en las dehesas de alcornoques y encinas de Cáceres y Badajoz. Del total de superficie de dehesa de la península, Extremadura cuenta con cerca del millón de hectáreas.

Pero independientemente del jamón que se elija, blanco o ibérico tenemos que tener en cuenta varios aspectos en los que deberíamos de fijarnos antes de comprar el pernil. Con una serie de detalles visuales podemos seleccionar el producto que queremos.
- Su origen.
- Su aspecto es uno de los primeros indicadores de su calidad.
- Un jamón serrano excelente debe tener un aspecto externo redondeado en su parte inferior,
un tamaño grande y gran cantidad de grasa. Además, es muy importante su firmeza.
Esto se comprueba tomando el jamón con ambas manos, por la parte más ancha y haciendo
presión con los dedos pulgares. No debe ser duro, pero tampoco excesivamente blando.
- Elegir una marca que nos ofrezca garantía de calidad.
- Hay que observar el periodo de curación que debe figurar en la etiqueta.
- Hay que buscar que el jamón tenga una buena cobertura de grasa y que la parte inferior del
jamón al menos tenga una cantidad de tocino de más de un dedo. Esto será indicativo de que la
grasa infiltrada en el interior va a ser suficiente.

Y para distinguir un jamón ibérico son esenciales algunos aspectos a tener en cuenta: que la pezuña sea negra y sin pelo, que la caña sea larga y que sea muy fina; cuanto más fina es, más puro es el cerdo, y pasando al corte se debe apreciar que las lonchas sean brillantes por el bajo punto de fusión de la grasa debido a la alimentación con bellotas. La carne magra de color rojizo con vetas de grasa entreveradas, y en lo referente al paladar que decir de su sabor único.

El jamón no es un embutido, es una pieza noble del cerdo curada eso quiere decir que ha tenido una transformación que lo hacen de muy fácil digestión. Aparte la cantidad de grasa no supera el cinco por ciento mientras que los embutidos pueden llegar a alcanzar hasta un 70 por ciento.

Un buen corte marca la dif
erencia.

José Morales, es todo un experto loncheador de jamón.

Un buen corte del jamón realza su sabor y aroma, mientras que un mal corte puede estropear incluso un jamón de gran calidad. Las lonchas deben de ser cortas y tan finas como sea posible. Un buen jamón se saborea mejor recién cortado.

José Morales, emplea varios cuchillos bien afilados para el corte del jamón, uno de ellos largo y de hoja ancha para la limpieza del jamón -paso previo antes de empezar el loncheado-, y otro largo para sacar esas finas lonchas que tan bien saben en la boca.
El caché de un maestro loncheador como José puede oscilar en torno a los 250 euros. Y el tiempo que puede durarle un jamón hasta que lo deja en el hueso es de hora y media.

Sigamos algunos de sus consejos para no tener accidentes domésticos esta Navidad.
Comenzamos por fijar la pieza en la tabla con la pezuña hacia arriba si se prevé un consumo rápido, y hacia abajo si se va a consumir más lentamente. Con el cuchillo ancho se realiza un corte vertical, no muy profundo, que trace una línea alrededor del jamón sin llegar al hueso. A partir de ahí, se va retirando la corteza sólo en la parte que se va a cortar. El tocino del jamón se tiene que conservar para cubrir posteriormente las partes abiertas y evitar que se reseque.

Durante el corte es muy importante que la mano siempre este detrás de la hoja del cuchillo, nunca delante, procurando no distraerse y prestar atención a lo que se está haciendo.

Solo queda acompañarlo con un buen vino y que ustedes lo disfruten.

10.12.08

Un puro placer

La elección de un buen cigarro habano requiere de unos conocimientos que escapan a cualquier bisoño que se inicie en el arte de los amantes del placer pausado -que es como llaman a los fumadores de cigarros habanos-. Porque a la hora de fumar un buen puro requiere de una cierta liturgia que transciende desde que se sostiene el cigarro en los dedos. La forma de cortarlo, la manera de prenderlo, de fumarlo, son claves para poder saborear un buen cigarro habano.
Los fumadores expertos hablan de "degustar" el sabor del humo comparable al placer que provoca catar un buen vino o disfrutar de una exquisita comida.

Ni que decir tiene que el puro precisa de su momento para saborearlo. Yo lo encuentro después de una excelente comida que culmina con una copa de buen licor, preferentemente coñac, ron o whisky, y tomado en pequeños sorbos bien acomodado en el sillón. Ese es el momento que considero idóneo para encender el cigarro y saborear su aroma pausadamente y sin prisas.
Los entendidos dicen que "el auténtico conocedor de habanos no fuma, saborea porque cada bocanada representa una experiencia única para el paladar".

Mí recién iniciada afición por los
puros es como consecuencia de mí buena amistad con Solano Salido "el tallista", un hombre que me ha tratado siempre como a un hijo, y un gran aficionado a disfrutar de una "fuma", y también en tiempo pasado fue un buen fumador de pipa.

Es mucha la literatura que se ha escrito en torno al tabaco y en un principio crei acertado titular este post " Puro humo" titulo de un libro de Guillermo Cabrera Infante, Pero me contuve al pensar que igual aparecían los recaudadores de la SGAE reclamando el pago de derechos por usar el titulo...
Como digo, este es un libro que recomiendo porque no se centra solo en la historia del tabaco sino en la actitud ante el tabaco a lo largo de la historia
con sus detractores y defensores.

En sus páginas se presta especial atención al cultivo del tabaco desde que el canario Demetrio Pela y el indio cubano Erio-XII Panduca trabajaron en la primera vega que se conoce.
Del cultivo salta a la elaboración, a las fábricas de tabaco, a las distintas partes del puro, a los tipos de cigarros, a las cajas, al cortapuros, al encendido, a las cenizas, al lugar donde protegerlos o esconderlos.

Cabrera Infante era un buen fumador de puros y en alguna ocasión he leído que había comentado que jamás compraría un habano revolucionario. Aunque reconoció en su momento que 500 años después de que Colón descubriera las Américas todavía no hay tierra que produzca mejores hojas de tabaco, y donde mejor se hace el torcido del cigarro puro.


Colón desembarco en Cuba en 1942 junto con Rodrigo de Jerez, con la intención de llenar las bodegas de oro, lo primero que vieron fue a un gran número de indios que se llevaban a la boca un rollo de hierbas torcidas a modo de tizón encendido. Quedaron sorprendidos por aquellos indios que echaban humo por la boca que llamaron los hombres chimenea. Sin saberlo habían descubierto el oro de estas islas, la planta del tabaco (nicotiana tabacum).

Groucho, Che Guevara, Charles Darwin, Churchill, Vladimir Ilich UlianovLenin, Michael Douglas, Schwarzenegger, Jack Nicholson, tienen en común la afición a los puros. Al igual que mí paisano Camachuelo, todos coinciden en llevar una “ch” en el nombre como síntoma de buen gusto en la querencia de saber disfrutar de un buen cigarro habano.

Hay vitolas míticas que se han ganado un lugar destacado en la historia del tabaco por su calidad. Y que no faltan en las mejores cavas que se precien.

Por ejemplo, hay un amplio abanico de elaboraciones para elegir: desde los Cohibas, Montecristo, Romeo y Julieta, Fonseca, Robaina, Partagas... etcétera, etc.



Mención importante tienen también los puros producidos por la Republica Dominicana, siendo este el primer país del undo en volúmen de cultivo.
Sus cigarros puros son los más populares en U.S.A. entre ellos están las diferentes elaboraciones de la marcas: Macanudo, Vegafina, o El Coto.


Las principales cualidades de un buen puro son: combustibilidad, textura, sabor, elasticidad, olor, color y equilibrio en la composición de nicotinas y aceites.
Para no hacer más extenso este post, en próximas ocasiones seguiremos hablando de todo el ritual que envuelve a estos torcidos cigarros puros.